SEMANA 6 Y 7: 18 AL 29 DE MAYO

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REPACEMOS LA TEORÍA DE LAS IDEAS...

LA TEORÍA DE LAS IDEAS: Dualismo ontológico.

La doctrina central del pensamiento de Platón es esta separación entre lo sensible, inmanente, imperfecto y mudable, y lo suprasensible, trascendente, perfecto e inmutable. Con este dualismo sintetiza Platón a Heráclito y Parménides, pues el mundo suprasensible participa de las características del ser de Parménides, mientras que el mundo sensible es perecedero y cambiante, como el de Heráclito. Por tanto, ni solo lo sensible ni solo lo inteligible: ambos caminos por separados conducen a una perplejidad paralizante, como de hecho ocurrió. Entre los dos ámbitos existe una relación que Platón trata de explicar alternativamente mediante la participación (methesis) y la imitación (mímesis). Pero ambos conceptos tienen sus inconvenientes: la participación compromete la unidad de las ideas, mientras que la imitación limita la realidad de los seres sensibles a ser meras imágenes de la ideas. Por eso, parece que Platón reservaba el concepto de participación para explicar las relaciones entre las Ideas, mientras que explicaba la dependencia de lo sensible respecto de lo suprasensible mediante la imitación.

El mundo de las ideas se ordena jerárquicamente, a la manera de una monarquía. Por encima de todas se encuentra la idea suprema de Bien, en la que se condensa la plenitud de ser y de perfección. La idea de Bien es la idea de las ideas, la causa, el fin y la razón última de la que participan las demás cosas. Platón la representa con la imagen del Sol. Esto significa que para conocer lo que es realmente el hombre, debemos conocer el hombre bueno; del mismo modo, conocemos un círculo, cuando conocemos un círculo perfecto, es decir que participa de la idea de Bien.

Las ideas son por esencia lo realmente real, sin embargo, su ser no depende de ellas, ya que son interdependientes; por ejemplo, la justicia realmente es una igualdad y la igualdad, una cierta justicia. Por eso, Platón pone por encima de la esencia, es decir, de las ideas, un principio que está más allá del ser que a veces llama Uno y, otras, Bien. Las ideas, como lo realmente real, son sumamente inteligibles; sin embargo, para conocer lo que está más allá del ser será necesario un saber superior al intelectual. Este es el momento henológico del pensamiento platónico que servirá como punto de partida del neoplatonismo. La henología (de, uno) es el paradigma metafísico que ve en el Uno el origen de todas las cosas y que, por lo tanto, utiliza como conceptos bases los de unidad y multiplicidad, identidad y diferencia, semejanza y desemejanza. […]

El ámbito suprasensible es, por esencia, imparticipado y sirve de modelo para que el Demiurgo, dios hacedor, plasme las ideas en lo sensible. La esencia de lo sensible no consistirá sino en ser mera imagen, copia, sombra e imitación de la verdadera realidad. El Demiurgo es el postulado platónico para explicar el origen del movimiento. Lo podemos imaginar como un alfarero que fabrica objeto de arcilla tomando como modelo objetos de metal. Todos los objetos que vaya produciendo se semejarán al modelo, pero nunca serán tan perfectos como él. […]

Aunque Platón habla de creación (poiesis), no tiene el sentido de creatio ex nihilo, sino de producción a partir de un material, como obra un alfarero o un artista; por tanto, aunque se podría decir que le ronda la idea, no hay en Platón un Dios creador. Pero, como en muchos otros temas, sus intuiciones, son muy valiosas, por ejemplo, cuando observa que <<la divinidad no es autora de todas las cosas, sino únicamente de las buenas>>.

Goñi, C. (2002). Historia de la Filosofía I. Filosofía antigua, Palabras, Madrid.

RESPONDA LAS SIGUIENTES PREGUNTAS. 

1. 1. De acuerdo al autor en la teoría de Platón existe una separación entre lo sensible y lo suprasensible. Lo primero hace referencia al mundo de lo inmanente, imperfecto y mudable. Lo segundo hace referencia al mundo de lo trascendente perfecto e inmutable. Esta idea presente en la filosofía platónica la podemos comparar con la visión religiosa-cristiana, en cuanto: 

    2.  Platón supera el planteamiento presocrático (Heráclito y Parménides) en la medida que explica lo perecedero y cambiante (Heráclito) con relación al mundo sensible; y lo suprasensible e inmutable (Parménides) con relación al ser; lo cual no está dado en la physis (naturaleza) sino en el hombre. Explique en qué consiste esta superación. 

    3.  La expresión empleada por el autor: “La idea de Bien es la idea de la ideas, la causa, el fin y la razón última de la que participan la demás cosas. Platón la representa con la imagen del sol”, ¿Cómo podríamos entender el empleo de la imagen del sol?

     

    4. De acuerdo a la teoría henológica (teoría que ve en el Uno el origen de todas las cosas) el Uno contiene los conceptos de unidad y multiplicidad, identidad y diferencia, semejanza y desemejanza. ¿Cómo podríamos entender esta teoría?   

   5. la figura del Demiurgo es una especie de mediador (remediador) entre lo suprasensible y lo sensible, que tiene el encargo de plasmar las ideas (trascendentes) en la materia (inmanente). Este símbolo, (el demiurgo) a semejanza de un alfarero que plasma en la arcilla una imagen ya existente en el metal tiene una especial significación en la teoría platónica, ya que soporta sobre sí la teoría de la dualidad ontológica. Teniendo en cuenta el idealismo platónico ¿Qué podríamos decir que es el Demiurgo?